Porsche se acostumbró a ganar el Rally Maya. En la séptima edición de esta prueba para autos cásicos, el Porsche 911 de 1978 marcado con el número 100 y pilotado por José Antonio Arguimbau y Rodrigo Baz se quedó con el trofeo ‘Corazón del Rally Maya’ tras ocupar el primer lugar de la clasificación general. De esta manera la pareja Arguimbau-Baz retuvo el título conquistado en 2019 y dieron a Porsche su cuarto campeonato en el llamado ‘Museo rodante más espectacular de América Latina’.
Arguimbau y Baz sumaron 443 puntos durante la competición disputada del 22 al 29 de mayo por 122 autos sobre 1200 kilómetros divididos en cinco etapas por las entidades mexicanas de Campeche, Yucatán y Quintana Roo. El segundo lugar correspondió al Porsche Targa de 1977 marcado con el número 95 y que compartieron Jorge Luis Machuca Rascón y Michelle Figueroa Hamacher, quienes acumularon 406 unidades.
Sin lugar a dudas, la principal clave de los cuatro triunfos de Porsche en las siete ediciones del Rally Maya es la fiabilidad de sus autos.
“Para nadie es un secreto que los Porsche ofrecen la mayor fiabilidad de todos los deportivos que hay en el mercado; no importa el modelo o el año”, dijo Arguimbau. “Nuestro 911 de 1978 con su motor bóxer refrigerado por aire no presentó ningún problema mecánico durante toda la carrera, como tampoco lo tuvimos en 2019”.
Los motores Porsche refrigerados por aire son de gran importancia en el Rally Maya, puesto que las altas temperaturas y la gran humedad del Caribe afecta mucho más a los vehículos con motores refrigerados por agua.
“En nuestro caso, toda la parte mecánica la lleva ‘Toño’, un hombre al que casi todos los miembros del Porsche Club le confían sus carros para que los ponga a punto, ya que ‘El Mago’ (como le dicen) siempre está atento para ayudar a quienes necesitan asistencia en la carretera o al final de cada etapa cronometrada”, dijo Baz.
La segunda clave del triunfo se basa en la comunicación entre piloto y copiloto. “Con ‘Toño’ hemos logrado una muy buena coordinación gracias a las muchas carreras que hemos disputado y a la gran amistad que nos une. El me entiende a la perfección y confía cuando le doy las instrucciones para entrar o salir de las curvas, para acelerar, frenar o cambiar las marchas de la caja manual de nuestro 911”.
Arguimbau y Baz coinciden en que otra de las claves para triunfar en un rally de precisión es no confiarse en las ayudas electrónicas sino usarlas como referencia. “Si bien es cierto que hoy en día un novato puede correr un rally simplemente utilizando una aplicación como Rabbit Rally, que por descarte da un margen de error de más o menos un segundo, nosotros la ajustamos para darnos un margen de mas o menos una décima y solo la usamos como complemento, puesto que nos gusta tener control absoluto del recorrido utilizando el odómetro y teniendo siempre presente la hora rally en nuestro reloj”.
La cuarta clave de la reciente victoria de Porsche en el Rally Maya fue la consistencia de Arguimbau y Baz. La dupla ganó tres de las cinco etapas y subió al podio en cuatro de ellas. “Solamente en la tercera cometimos un grave error al no cuadrar bien la hora oficial del evento, lo cual nos dejó en margen negativo de seis décimas de segundo por cada minuto cronometrado. Esto nos impidió figurar en los puestos de arriba”, dijo Arguimbau.
‘El Mago’ Arguimbau y el ‘Conejo’ Baz ya comenzaron a hacer planes para participar en el Rally Maya de 2022. No se quieren perder la travesía por el hipnotizante Caribe que ofrece hermosos paisajes naturales y postales para el recuerdo que se viven mejor dentro de un Porsche gracias a la fiabilidad y comodidad que ofrecen los deportivos de Stuttgart.
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